La deuda de Bolivia alcanzó el 84% de su PIB en 2023
El Fondo Monetario Internacional (FMI) reveló que la deuda pública de Bolivia representó el 84% del Producto Interno Bruto (PIB) al cierre de 2023. Esta cifra fue publicada en el informe del Artículo IV, un análisis económico que permaneció oculto durante diez meses y que finalmente salió a la luz el 31 de enero de 2025.
El análisis del FMI advierte que las políticas económicas de Bolivia son insostenibles y requieren cambios urgentes. A pesar de ello, el gobierno boliviano presentó cifras distintas, asegurando que la deuda representó solo el 48% del PIB.
El reporte detalla que el endeudamiento del país se divide en dos:
- Deuda externa, que son los préstamos adquiridos con otros países o instituciones internacionales como China y el Banco Mundial.
- Deuda interna, que corresponde a obligaciones con empresas e instituciones nacionales. En este punto, el informe revela que el gobierno utilizó fondos de pensiones nacionalizados y financiamiento del Banco Central para cubrir sus necesidades.
El documento también expone la creciente escasez de dólares en Bolivia, situación que ya había generado el colapso del Banco Fácil y restricciones en el acceso a divisas en otras entidades bancarias.
Otro dato preocupante es la inflación. Mientras el FMI proyectó una inflación del 4,5% para 2024, el cierre de ese año reveló una inflación del 9,97%, más del doble de lo estimado.
Desde 2007, la deuda externa de Bolivia se ha multiplicado por seis, y de acuerdo con las proyecciones del FMI, si la tendencia actual continúa, el endeudamiento podría alcanzar el 99% del PIB en 2032.
El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, minimizó el informe, argumentando que se basa en datos de 2023, por lo que considera que es un análisis desactualizado. Sin embargo, surge una interrogante clave: si esos datos ya son parte del pasado, la economía boliviana actualmente está mejor o peor?
El informe del FMI deja en evidencia una realidad económica compleja para Bolivia, con una deuda creciente y un panorama financiero que exige acciones inmediatas.