Bolivia apunta a monetizar la reducción de gases de efecto invernadero
Con proyecciones de hasta $us 5.000 millones
l Gobierno de Bolivia ha anunciado su incursión en mecanismos innovadores para monetizar la reducción de emisiones de carbono (CO₂), con proyecciones que podrían generar ingresos de hasta $us 5.000 millones, según informó el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas. Esta estrategia representa una nueva forma de financiamiento sostenible que no implica endeudamiento.
La propuesta se basa en la gestión sostenible de recursos naturales y la implementación de políticas que promuevan la reducción de gases de efecto invernadero, respetando la soberanía estatal. A través de esta iniciativa, Bolivia podría obtener recursos financieros significativos mientras contribuye a la protección del medioambiente.
El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, explicó que el mecanismo no consiste en la emisión de bonos verdes, sino en la aplicación de un plan soberano enfocado en la reforestación y mitigación ambiental. “Este mecanismo permitirá a Bolivia obtener ingresos sin contraer deuda, generando valor mediante políticas de conservación, forestación y reforestación”, señaló.
Para este proyecto, el Ministerio estableció contacto con Laconic Infrastructure Partners Inc., una plataforma que estima que Bolivia podría alcanzar las proyecciones mencionadas a través de políticas efectivas y planes soberanos de reducción de emisiones. No obstante, Montenegro aclaró que las certificaciones necesarias para cuantificar las emisiones estarán abiertas a cualquier plataforma que ofrezca tecnología avanzada, sin comprometer exclusividad.
“Nosotros hemos establecido con toda claridad que no hay exclusividad con una empresa. Si esta u otra tiene una tecnología de medición moderna, deberíamos optar por la que mejor se adapte a las necesidades del país”, indicó el ministro.
Este enfoque alternativo de financiamiento resulta especialmente relevante, dado que Bolivia enfrenta un bloqueo de más de $us 1.200 millones en la Asamblea Legislativa Plurinacional, recursos que han estado congelados por más de dos años. Montenegro destacó que esta iniciativa ofrece un nuevo panorama financiero y una oportunidad para ampliar las opciones económicas del país.
El éxito de esta estrategia dependerá de la capacidad del Estado para implementar políticas sólidas que aseguren resultados medibles en términos de reducción de emisiones y protección ambiental. Además, refuerza el compromiso del país con una economía más sostenible y respetuosa del medioambiente, mientras genera ingresos significativos para enfrentar sus desafíos económicos actuales.
Con este plan, Bolivia da un paso importante hacia el aprovechamiento de los beneficios financieros que pueden derivarse del cuidado del planeta, marcando un camino innovador en la región.